Comenzamos el recorrido de por la zona Este, de uno de los departamentos más turísticos de Uruguay como lo es Colonia.
A menos de una hora de viaje del Sheraton Colonia Golf & Spa Resort, que al llegar a la ciudad de Colonia lo espera con todas las comodidades que le ofrece un Resort cinco Estrellas, nos encontramos con esta zona tan tradicional de Uruguay, comprendida entre las ciudades de Colonia valdense, Nueva Helvecia, Rosario y Juan Lacaze.
Esta región de culturas de inmigrantes suizos, alemanes, austriacos, piamonteses, españoles entre otros, mantienen vivas sus tradiciones expresadas en la música y la gastronomía típica de esas regiones.
Cuando hablamos de elaboración de quesos artesanales, una visita que no puede faltar es a granja La Cumbre, ubicada en la zona rural de Nueva Helvecia allí nos recibe Graciela, madre de Karina Celio, hoy integrante de la quinta generación de esta granja.
Con una reconocida tradición quesera en la región que se remonta al año 1870, con la llegada de una importante cantidad de inmigrantes suizos a la región, está granja ha logrado estar presente y afianzarse a lo largo de estas generaciones.
Esto comienza con la llegada de Víctor Waller junto a María Ana Meny y de Feliz Celio y Luisa Dafond, quienes decidieron llegar a Uruguay y continuar con esa importante tradición de elaboración de quesos que tenían en su país, adaptándose a un nuevo sistema, que iba desde el clima, hasta las nuevas costumbres que podían encontrarse en Uruguay.
Granja la Cumbre comenzó siendo un pequeño establecimiento lechero, quesero y vitivinícola, pero en 1994 esta granja pasó a enfocarse solamente en la producción de quesos artesanales. Karina, hoy al frente de esta empresa pero con ayuda de toda la familia, nos cuenta que actualmente tienen una producción de unos 7000 kilos de queso al mes con unas 110 vacas en ordeñe, donde cada una de ellas dan alrededor de 22 litros de leche diarios. Hablando en materia de la maduración de quesos, nos cuenta algo que realmente desconocíamos, y es que por ejemplo en un queso Parmesano el proceso puede llevar hasta tres años y que por cada quilo de queso que allí se elabora se necesitan en promedio 10 litros de leche. Este es un lugar que merece ser visitado siempre.
En el recorrido por esta zona de Colonia también rodeado de naturaleza, nos encontramos con Heidrum Bier, una pequeña planta de elaboración de Cerveza Artesanal con un espíritu vikingo, en ese lugar nos recibe Eduardo Basino, uno de los socios de este emprendimiento junto a Adriano y Fernando.
Eduardo nos dice que durante estos dos años como marca en el mercado estamos muy conformes por la excelente aceptación que hemos tenido por parte del público, que día a día nos sigue respondiendo de muy buena manera. Esta fábrica tiene una pequeña cava estilo sótano donde las personas pueden hacer degustaciones de los diferentes tipos de cerveza que allí se elaboran.
Fernando además se refiere que en la actualidad tienen cinco estilos fijos de cerveza y un estilo de cerveza por temporada. A su vez Eduardo también es propietario de cervecería Berlín, ubicada en el corazón de esta ciudad, un local estilo casona antigua, donde su estructura original es conversaba tal cual, solo con algunas remoderaciones. Y este lugar todas las noches este lugar es visitado por decenas de personas amantes de la buena cerveza artesanal y buenos tragos.
Al mediodia nos trasladamos a Colonia Valdense ciudad a unos 6 Km de Nueva Helvecia, justamente en ese lugar y sobre la ruta Nacional 1 nos encontramos con Che Paco Resto. Ya en el lugar, dialogamos con Gabriela Rostan propietaria de este resto, que tanto al mediodía como en las noches lo visitan no solo personas de sus alrededores sino de otros puntos del departamento y del país, ya que su ubicación sobre la ruta así lo permite, eligiendo un lugar cálido y con una atención personalizada por parte de las personas que lo visitan. Parrillada, bar de vinos, restaurante con minutas y comidas caseras son algunas de las opciones que existen a la hora de llegar. Justamente cuando hablamos de que es visitado por gente no solo de la región sino de otros lugares, Gabriela nos comenta que ellos todo el año trabajaban de muy buena forma con el turismo, pero estamos muy contentos ya que nuestro público de acá de la zona que siempre está presente y aprueba de muy buena manera nuestra gastronomía.
Chocolatería extrabaltt y Granja los Fundadores
Si hablamos de la chocolatería, ubicada en una zona de tradición suiza, desde 2014 momento en que nace Extrabaltt a elaborar sus productos con materia prima de Bélgica, esta empresa ha marcado un rumbo muy importante en el mercado de los chocolates por su excelencia a la hora de la elaboración de sus productos.
En su tienda, el visitante podrá elegir entre más de 70 diferentes productos con elaboración totalmente artesanal.
En ese mismo lugar esta Granja los Fundadores, forma parte de una empresa familiar que desde colonia Suiza lugar donde está ubicada ofrece una extensa línea de productos artesanales, como dulces, mermeladas, jaleas, conservas, además de muy buena calidad quesos elaborados en esa zona.
Quienes llegan a los fundadores se encontrarán con algo muy pocas veces visto y es que quienes allí están para atenderlo lucen su vestimenta típica suiza. Esta empresa familiar con 43 años de trayectoria en el mercado de esta región, tiene que ser una elección a visitar por parte de quién llegue a esta zona de Uruguay.
Si durante la tarde te dan ganas de tomar un té en un lugar totalmente diferente, al ingreso a Nueva Helvecia está Té con amor, un lugar para merendar con estilo propio. Andrea Delfino creadora de esto, siempre quiso tener un salón de té y este deseo se volvió realidad. Ella nos cuenta que decidió abrirlo ya que es de Nueva Helvecia y que en principio fue un servicio a domicilio, con todo completo.
«Durante muchos años compré loza en diferentes lugares porque sabía que algún día iba poder hacer realidad esto, yo trabajo con vajilla Antigua y de estilo. Fui madre de cinco hijos y durante muchos años de mi vida ejercí la docencia, como mis hijos fueron creciendo y se fueron a otros lugares, esto que en principio era un sueño para mí cada día estaba más cerca de la realidad, hasta que se logró. Yo acá sólo trabajo con dos clases de té y estoy sumamente feliz de hacer lo que me gusta y además poder ver que la gente que viene se va muy contenta con lo que ofrezco».
En su visita a la región no puede faltar bodega Los Pinos. Su propietario Julio Ingold una persona siempre de muy buen humor, te recibí y junto a él parte de su familia te dan la bienvenida a este establecimiento. Los Pinos es una de las pocas bodegas ubicadas en esta región del departamento y es una empresa familiar que cumplió 100 años en el mercado.
Además es la única bodega de esta zona que aún usa los métodos artesanales en la elaboración, allí quién la visite podrá encontrar vinos tintos, rosados y blancos de uvas de sus propios viñedos tales como: Cabernet, Merlot, Tannat entre otros. Esta bodega ya hace algunos años abre sus puertas a los visitantes para realizar recorridos guiados por sus viñedos y la planta de elaboración de estos productos, finalizando con una picada y una degustación de los diferentes vinos que allí se elaboran.
De esta zona nos trasladamos a la ciudad de Rosario que así como las otras ciudades cercanas, ésta se encuentra en una situación bastante privilegiada, entre medio de dos capitales Rioplatenses Montevideo y Buenos Aires. Esta ciudad cuenta con una profunda tradición religiosa que gira en torno a la virgen, nuestra señora del Rosario.
Su imagen ubicada en el año 2000 en la pequeña ermita junto al arroyo Colla. La misma ha sido objeto de veneración y misterio, este último relacionado con la aparición de lágrimas surcando el rostro de la imagen de la virgen.
Finalizando el día llegamos a Mon Pettit allí nos recibe Martín y Eliana propietarios de este lugar, un muy lindo hotel ubicado en el km 127.5 sobre la ruta 1 a 50 kilómetros de la ciudad de Colonia, con un paisaje totalmente vestido de verde y en un entorno realmente de envidiar, este hotel cuenta con habitaciones totalmente equipadas, una piscina abierta y un campo deportivo de gran magnitud.
En el segundo día de recorrido por este departamento a unos 90 Km de Colonia nos encontramos con la ciudad de Carmelo. Bien al oeste de la capital del departamento y claro de Uruguay, esta ciudad y todos sus alrededores están en completo auge y es que es visitada por decenas de miles de argentinos al año que mueren por esta zona de Uruguay.
Carmelo es la segunda ciudad del departamento con mayor población, solo por detrás de la capital departamental Colonia. Es muy conocida por su puerto, la playa seré, su arquitectura entre otras. Está rodeada por varias viñas que en un radio no mayor a las 15 km ofrecen un enoturismo de primer nivel. A modo de ejemplo, al visitar estas bodegas el turista encontrará una visita guiada por cada rincón de estos establecimientos, información general y de la historia que hay detrás de cada bodega, así como una deliciosa degustación de todas las variedades de vino que allí se elaboran.
Las bodegas entendieron ya desde hace un tiempo que cuando el turista del vino queda conforme con el lugar, la mejor publicidad es recomendar este lugar para que sea visitado. Por la excelente predisposición que nació entre todas las bodegas de esta zona, es que comienza hace un tiempo a formalizarse el turismo del vino.
RUTA DEL VINO DE CARMELO
Acompáñanos a descubrir en primera persona esta bellísima zona y a vivir lo mejor del Enoturismo. El primer punto el cual visitamos es bodega Zubizarreta, allí nos recibe Mariela integrante de la tercera generación al frente de este emprendimiento. La familia Zubizarreta tiene más de medio siglo en el rubro vitivinicola, sus uvas de cultivo son Merlot, Cabernet Sauvignon, Tannat entre otros. Mariela nos cuenta que actualmente tienen 40 hectáreas de viñedos y que se producen un promedio de 600000 litros de vino anuales. Nuestra especialidad son los tintos y tenemos nuestra línea de guarda un vino discontinuado de 2016 con 3524 botellas.
Esta bodega realiza todos sus procesos de forma manual y hoy cuenta con el Marselan una cepa relativamente nueva en Uruguay, allá por el 2001 fuimos la bodega pionera en pensar en ella. De Zubizarreta nos dirigimos a bodega Irrurtia, allí comenzamos la charla con Marcelo propietario de este lugar que nos cuenta que todo nace a finales del siglo XlX, yo soy parte de la cuarta generación de esta bodega haciendo vinos en Carmelo, pero esto como te dije comenzó con Lorenzo Irrurtia mi bis abuelo, quien fue un inmigrante vasco que llegó a estas tierras en una época de esplendor de lo que era Carmelo y toda su zona de influencia justamente a finales de ese siglo. Pero en realidad Lorenzo trabajo mucho tiempo en canteras de granito, porque en ese momento Buenos Aires estaba en franca expansión y necesitaba materiales vía marítima.
En ese contexto Lorenzo llegó a Uruguay, trabajo muchos años en la explotación del granito, hasta que pudo juntar un capital, comprar una chacra y en 1913 tener su primer vendimia. Pero ya en ese momento Lorenzo tenía 56 años, entonces fue para él más el concretar un sueño que el transcurso de su vida.Está bodega cosecha en promedio más de un millón de kilos de uva anuales, lo que daría aproximadamente un millón de botellas al año. El principal mercado en el que está presente Irrurtia es el uruguayo, pero también se venden de muy buena manera los vinos en Brasil, Canadá, Estados Unidos y España.
La catedral de los sentidos
Llega el mediodía y es momento de visitar bodega El Legado. Está bodega hoy estilo boutique nace en 1968, ubicada en plena ruta del vino, es una bodega familiar también acompañada con una hermosa posada con apartamentos totalmente equipados para que el visitante pueda pasar allí unos días de relax en medio de un paisaje espectacular.
Disfrutar de unos vinos generados mediante el cultivo bajo el sistema de cordón vertical (único en Uruguay) que prioriza la calidad de la uva, son alguna de las experiencias a vivir en este lugar. Bernardo Marzuca propietario de El Legado nos cuenta que actualmente elaboran en el entorno de las 10000 botellas de vino al año a unos 27 grados de fermentación.
Almacén la Capilla y bodega y viñedos Cordano, ubicada a solo tres Km de la ciudad de Carmelo, allí nos encontramos con Diego Veccio, integrante de la quinta generación de la familia Cordano. Con un promedio de 60000 litros de producción al año, está bodega cultiva uvas de alta calidad enologica como lo son Cabernet Sauvignon, Cabernet Franc, Tannat, Merlot entre otras variedades. Diego nos cuenta que durante la época de pandemia por covid la venta de vino creció un 17 por ciento en comparación a meses anteriores.
Algo interesante, es que así como las demás bodegas, acá también se realizan visitas guiadas, pero también actividades de poda, cosechas, en donde el visitante puede participar de ellas y también realizar distintos tipos de degustaciones de vinos. Estas actividades donde las personas pueden participar se realizan en dos épocas del año. La vendimia del 15 de febrero al 15 de marzo y la poda desde los primeros días de mayo a fines de julio. En almacén La Capilla además de vinos de primera calidad el turista que los visita podrá encontrar una amplia gama de dulces, mermeladas, quesos, y varios productos más totalmente caseros.
Otro lugar que no puede faltar a la hora de la ruta del vino es bodega Campotinto. La familia Vigano, con raíces en Fiesole, corazón de la Toscana, siempre migró en busca de lugares en donde se sintiera cómoda.Es así como está generación llegó a Carmelo, con la idea de hacer un lugar en dónde propios y ajenos se sintieran cómodos y que en definitiva sea generador de anécdotas, así nace Campotinto. Esta bodega se metió de lleno con el Tannat, cepa que logró destacar a Uruguay en varios de los países Vitivinicultores del mundo. Siendo una bodega Boutique, lleva adelante un muy buen cuidado de la viña buscando una excelente maduración de las uvas.
Hoy día Campotinto cuenta con diversas expresiones en Tannat, Blends, Viognier y su espumante extrella, medio y medio, en homenaje a la famosa bebida nacida en un bodegón del puerto de Montevideo, entre algunas más. Este lugar paradisíaco cuenta además con una posada de excelente nivel, con habitaciones totalmente equipadas, suites que van desde los 25 metros cuadrados hasta los 34 metros, ideal para cualquier época del año para descansar o bien salir de la rutina diaria. Además cuenta con una piscina al aire a libre así como mini campos para practicar deportes y asegurar así el disfrute de sus huéspedes.
Seguimos el recorrido en Carmelo y es tiempo de visitar Narbona.Esta bodega tiene un extensión de 50 hectáreas, ubicadas en el casco de estancia original de 1909 donde Juan Narbona fundó una de las primeras bodegas de Uruguay. En 1998 se inició la plantación de viñedos, 8 años más tarde de que el casco de la estancia es reciclado.
Con una extensión de árboles frutales que conviven con los viñedos, sus frutos son destinados a la elaboración de distintos tipos de dulces y mermeladas que allí se elaboran para llevar a la mesa del consumidor. Narbona Wine Lodge Hotel Boutique ofrece cinco habitaciones de lujo, donde son distribuidas tres de ellas con vistas a la bodega y dos con vistas a los viñedos. En este lugar se pueden realizar algunos eventos como casamientos, convenciones y actividades complementarias como pasos, degustación de vinos y productos que allí se elaboran.
Para finalizar este recorrido llegamos a Casa Chic una pequeña bodega y un hotel de lujo sobre la costa, son dos emprendimientos que dan sorpresa total a los visitantes de esa zona rural de Carmelo por su encanto.Federico Bonomi es el propietario de Finca Buena Vista, una pequeña bodega localizada en el camino que une la ruta 21 y el paraje punta Gorda. El nombre de la bodega mejor no se podría asimilar al lugar, un paisaje encantador, con tanques de acero inoxidable, piletas de hormigón, algunas cuántas barricas, además de una antigua prensa de madera y equipos para un buen funcionamiento y obtención de vinos de calidad.
Actualmente allí se elaboran 4000 botellas de producción de vinos al año. Un lugar con un paisaje encantador y un hotel boutique de 20 habitaciones con viejos olivos que dan pinta a la entrada del Lobby-restaurant, dándole un toque mágico a este lugar que no se puede dejar de visitar.
INFORMACIÓN ELABORADA POR:
Néstor Silvera (Uruguay) y Jesús Abad (España)