Como fichas de dominó, así están cayendo todas las delegaciones que la compañía aérea Latam tiene en América Central y América del Sur, Latam Airlines Colombia ha presentado al Ministerio del Trabajo la solicitud de despido de los 523 trabajadores, en el caso de Argentina la compañía ha anunciado el cierre de su filial «indefinidamente» y el cese de operaciones de vuelos internos, lo que supondría el despido de cerca de 2.000 personas. El grupo Latam Airlines, cuyas acciones siguen en caída libre, no descarta seguir operando vuelos internacionales a través de otras empresas subsidiarias
Como medidas de protesta, un grupo de trabajadores de la filial en Argentina permanece en el hangar vigilando que la compañía no se lleve los aviones, mientras centenares de compañeros protestan en el exterior.
Óscar Muñós, de la Unión Sindical de Trabajadores Aeronáuticos de la República Argentina (USTARA), en declaraciones a Glocal, denunció que Latam Argentina contrató una empresa tercerizada, New Air S.A. para «despreservar los aviones y poder llevárselos del país». Desde que conocieron la noticia, llevan tres días haciendo guardia en el propio hangar para evitar que la compañía se lleve los aviones.
En esta video entrevista, grabada este jueves por la noche (hora española), nos explican cómo viven la situación y alzan la voz para reivindicar sus puestos de trabajo o unas indemnizaciones dignas en caso del cese definitivo de la actividad. Por el momento, lamentan que nadie de la compañía de aerolíneas se ha sentado a negociar con los trabajadores en Argentina, pero observan con rabia e imponencia lo que está sucediendo en las delegaciones de otros países.
Muñós y sus compañeros nos atendieron a través de vídeo llamada desde el propio hangar y delante de uno de los aviones. Con muy poca cobertura y con la imagen a veces entrecortada pero no suficiente para hacer oír sus voces de protesta contra la decisión de la compañía de dejar en tierra a miles de trabajadores. Nos explicaba que llevan 3 días encerrados en el hangar vigilando los aviones y que compañeros de otras compañías les ayudan con alimentos y medicinas porque saben que fuera del hangar les espera la policía. A continuación os ofrecemos la conversación mantenida desde Barcelona con estos trabajadores de la filial de Latam en Argentina:
Cabe recordar que la aerolínea chilena, con sede central en Santiago, es el resultado de la fusión de las aerolíneas sudamericanas Lan, Tam y sus filiales.
Hasta antes de la epidemia por coronavirus, la aerolínea operaba con vuelos con pasajeros a un total de 136 destinos en 24 países y conexiones con carga a más de 144 destinos en 26 países.
Sus ramificaciones tienen un alcance internacional ya que operaba en países de América del Sur, Centroamérica, América del Norte, el Caribe, Europa, África, Asia, Medio Oriente y Oceanía.
Desde que la aerolínea anunció el cese de sus operaciones el pasado 17 de junio por tiempo «indeterminado» se han ido sucediendo situaciones que afectan a los trabajadores como el pago del 50 por ciento del salario o el anuncio de despidos a los trabajadores de algunas filiales.
Los representantes sindicales de los trabajadores están a la espera de pactar una salida de la compañía en las mejores condiciones posibles para los afectados.
Con el silencio como respuesta, por parte de la compañía, y con el temor a que la empresa reagrupe sus aviones en las pistas del aeropuerto de Santiago, siguen las movilizaciones y las protestas para evitar que la compañía se lleve los aviones sin una negociación con los trabajadores que con su cierre dejará en tierra.