El periodista Jesús Cintora responde a las preguntas desde su domicilio en Madrid
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Ha dormido en los bajos de un camión, aunque precisa que “fue en el suelo
de la cabina”
y en hoteles de 5 estrellas, pero puntualiza que “si estuve,
que no lo recuerdo, yo no lo pagué, de 4 estrellas sí”
. En los primeros
minutos de la conversación se percibe que estamos ante un periodista de
raza, capaz de despejar cualquier balón que le lancen a portería.
Confiesa que ha robado manzanas del huerto siendo un chaval, aunque ya ha prescrito, y que sus primeras propinas como monaguillo las invirtió en la tienda de Paco El
Tabernero.
Fue corresponsal a la vuelta de la esquina para comprarle el diario Ya a Don
Saturio, en Ágreda, donde no nació porque su madre no podía con tantos
dolores, “ya nací incordiando un tanto”, y tuvo que ir al hospital de Soria,
no como el hermano mayor que sí vino al mundo en ese pueblo de unos
3.000 vecinos y en el que si uno de ellos se lo propone consigue la medalla
de oro en los Juegos Olímpicos como aquel vecino, de nombre Fermín y de
apellido Cacho, que lo logró en Barcelona 92.
No tiene padrinos, bueno sí, su tío José y su tía Dolores. Empezó en la radio
cuando si algo pasaba estaba la SER, la de Iñaki Gabilondo y Carlos Llamas.
Y en televisión, ha madrugado para Las mañanas de Cuatro, le hemos visto
A pie de Calle y pisando La Línea Roja, para pillar después Carretera y
Manta.
Y cuando empezábamos a ver Las cosas claras, en TVE, todo acabó con un
fundido a negro y llegando a la conclusión de que ‘No quieren que lo sepas’
(Editorial Espasa).


Tenemos en nuestras manos el libro del que todos hablan y que ya va por su quinta edición y en el que nos demuestra que “hay gente chunga que tiene poder” y nos abre las puertas del oficio de contar noticias. “No concibo el periodismo que esté para lamer las botas del poder”.
Uno de los capítulos más incómodos es en el que se refiere al rey Emérito y recuerda cómo “se pasaba de puntillas en los grandes medios”. Confiesa que “se ponen nerviosos en el tema de la monarquía”.

“Si la máxima personalidad no es ejemplar pues lo que se traslada a la población es tremendo, es ver que quien la hace la paga solamente en algunos casos y eso para la democracia es un misíl en la línia de flotación”.


El becario “Cintorilla”


Quien le señaló el camino fue su profesor de lengua española en EGB, José
Vilda, que le empezó a enviar artículos para que los publicaran en Diario de
Soria. Sus primeros pasos en radio fueron en la Cadena SER de Soria.

“Las prácticas en la SER me permitieron que con la caña y con el tiempo, uno se hiciera pescador”.


No queremos que ésta sea una entrevista más y en Glocal localizamos a
quien le dio aquella primera oportunidad.
Antonio Pascual, ex director de SER Soria, asegura que “ya se veía venir.
Creo que es parte de lo que ha ido haciendo y es reflejo de lo que es su
familia. Una cosa ha llevado a otra, lo que pasa es que entre medio él
evidentemente se lo ha currado”
.

Aquel joven, admite el propio Jesús Cintora “tenía un acento no muy
dulce para lo que era la radio”
pero “empecé porque necesitaban gente
en agosto y se habían ido los titulares de vacaciones”
.


Aquellos veranos en los estudios de la calle Santa Luisa de Marillac, 1 de
Soria dejaron algunas anécdotas. “Me pusieron a hacer Cadena Dial en
directo en autocontrol y al poco rato estaba liando la de Dios es Cristo.
No fue fácil”
, reconoce Cintora.
El entonces director de la emisora, Antonio Pascual valora la evolución que
ha tenido el periodista y presentador hasta el día de hoy.

“Lo que tengo claro es que se ha ido autoconstruyendo.

Se ha ido modelando y enriqueciendo con todos y también con la práctica. No tiene miedo a nada ni a nadie. Tiene una buena dosis de prudencia”.
De su etapa como becario le queda la premisa de que “si uno ha tenido
noticias que contar en agosto en Soria, siempre habrá noticias que
contar en el ámbito nacional sin duda”
.


Por aquel entonces, José Luis Bravo era el Jefe de Informativos de SER
Soria y recuerda a Cintora como un joven que “ya tenía sus propios
criterios.

Me asombraba porque generalmente los becarios suelen

ser gente bastante dócil y ya se me amontonaba un poco en alguna
ocasión. Incluso tuvimos alguna que otra pequeña refriega, no recuerdo
que fuera relevante pero la conclusión que saqué es que este
muchacho al menos tiene criterio”
.
Por su parte, Jesús Cintora admite que “sin la SER de Soria, no hubiera
llegado a lo que he sido, ni de coña
. Hablando del periodismo actual y de
la tecnología multimedia que impera en las redes sociales, subraya que “hay
un tren que está presente y pasando a toda pastilla y creo que hay que
estar si queremos conseguir un tiempo en este oficio”
.


Sí quiere que lo sepas

En el interesante debate que se genera entre los tres invitados, se pone
sobre la mesa la frase de Iñaki Gabilondo “es el mejor momento para

hacer periodismo, pero el peor momento para vivir del periodismo”, una
profesión que muchas veces toca vivirla como en una montaña rusa. José
Luis Bravo, con la perspectiva del periodista jubilado que ahora es, señala
que el trabajo del informador “está muy condicionado sobre todo por la
parte comercial y la presión que tiene el efecto negativo de la
autocensura”
y la realidad más actual de la “minimización de los equipos
de trabajo que en algunos casos es de una única persona haciendo
todo”.

Fotografía compartida por Jesús Cintora en redes sociales.

En el recuerdo queda la despedida de Cintora en TVE en el último programa
de ‘Las cosas claras’, sin morderse la lengua: “Hacemos periodismo. Hay
gente que por detrás hace otras cosas. Y con eso tenemos un problema
muy gordo. Sean honestos, hagan periodismo. Muchísimas gracias”
.


Ese agradecimiento lo está dando en persona durante la presentación del
nuevo libro ‘No quieren que lo sepas’ que está recorriendo toda España. No
esconde que tras la gira está el deseo de “volver al audiovisual” aunque no
descarta volver a abrir el cajón de la literatura. “Sí me gustaría escribir
novela en algún momento. No creo que mi fuerte sea ese ahora. Soy de
audiovisual”
.
Y a la espera de volverle a ver en la pequeña o gran pantalla, nos
despedimos del periodista y presentador, pero también del “hijo de la Mari
Luz, la carrasca”
y le deseamos que, como decía su abuelo: “Que vaya
bueno”.

Puedes ver la parte más interesante de la entrevista a Jesús Cintora en el siguiente vídeo:

Y si lo prefieres, puedes escuchar la entrevista emitida en el programa Glocal que se emite en Radio La Llagosta, en el siguiente enlace:

OFF THE RECORD

Lo que a priori era una entrevista más, que su agente de la editorial Espasa tenía anotada en la agenda, se convirtió en una agradable sorpresa. Jesús Cintora no se imaginaba que hablaríamos de sus primeros pasos en la emisora de Soria y menos que se unirían a la conversación un par de profesionales con los que compartió aquella etapa.

Se da la casualidad que quien escribe estas líneas también fue becario en aquella misma emisora justo el verano anterior, por lo que era fácil imaginar que Cintora informase en directo desde la Unidad Móvil a pie de calle, se hiciera autocontrol en Cadena Dial y hasta leyera necrológicas de Funeraria San Saturio, un clásico por aquella época en el 99.9 de la frecuencia modulada.

Estaba previsto grabar la entrevista durante su estancia en Barcelona, pero no logramos cuadrar horarios y lo que en principio deslucía el resultado final, al no ser posible grabar la conversación en persona, se convirtió en una oportunidad fantástica para unir testimonios desde Badajoz y desde Soria. Cuando el técnico pulsó el Stop, siguió la conversación con un «ya tenemos una edad y la profesión está como está. Habrá que reinventarse». Y en eso estamos muchos, tal vez demasiados.

Por Jesús Abad

Periodista multimedia desde 1996

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